A través del teorema de Pitágoras, podemos "SEGUIR" conociendo nuestro camino en esta vida. Tenemos un plano mental, la materia y el espíritu, como el triángulo.
Si tomamos el triángulo y extendemos en la dimensión plana cada lado del triángulo, tenemos que del triángulo salen 3 cuadrados, 2 equiláteros y un paralelograma. A partir de esta figura y con parte de nuestro nombre, podemos definir etapas claves en nuestra vida y, así, entender algunos porqués...
Un cuerpo físico, más el triángulo del espíritu: alma, mente y cuerpo.
El cuadrado depende del triángulo, ya que primero nace el triángulo y, a su vez, el cuadrado necesita del triángulo para nacer...
La ruta numérica ofrece la posibilidad de conocer los puntos claves de nuestra vida y la geometría sagrada nos da a la posibilidad de saber por etapas, sucesos y energías presentes.
El motivo de "saber" es único... conocernos para conscientizarnos y cambiar la visión de la vida, para seguir evolucionando, desde la esencia, desde el alma... Si esto no sucede, inútil sería el conocimiento...